
Puede ser que el mundo jamás se ponga de acuerdo en nada, a excepción quizás de las albóndigas.
Y es que es un platillo tan popular, que cada país (al parecer) tiene su propia forma de hacerlas, entre las más famosas, las italianas y las suecas [gracias Ikea :D]
Pero todas tienen algo en común y es la base de la receta, así que hoy les traigo mi receta favorita, porque es la más sencilla.
A veces menos es más y este es el ejemplo perfecto. De todos modos en las notas encontrarán con que las pueden combinar para hacer algunos de los platillos con albóndigas más ricos del planeta.

Ingredientes
- 500 grs de Carne molida (más detalles en los hacks, aquí pero más abajo)
- 1 Yema de huevo
- 4 cucharadas (1/4 taza) de Pan molido o rallado
- 1/3 taza de Leche
- Sal y pimienta
- Hierbas (las de tu preferencia, pueden ser finas, italianas, de Provence, etc)
Preparación
En un tazón mezcla la carne molida, la yema de huevo, pan molido, leche, sal, pimienta y sazona con las hierbas o especias que más te gusten.
Forma las albóndigas lo más uniformes posibles, esto no solo va a ayudar a que se cocinen parejo, sino da una apariencia pulcra a tus platillos.
Para cocinarlas puedes utilizar diferentes métodos: fritas en sartén, en un líquido, al vapor, o en freidora de aire.

Los hacks
La carne:
Definitivamente las favoritas del mundo son las de res, sin embargo puedes agregar otro tipo de carne o sustituirla.
Mi mezcla favorita es definitivamente con carne de cerdo, 50% res y 50% cerdo, aunque he oído a amigos que prefieren 70% res y 30% cerdo. Está mezcla por lo general se hace para hacerlas más ricas y más suaves.
Por supuesto que no está limitada, deben de probar las albóndigas de pollo, que son de mis favoritas. También las hay de cordero, de camarones, salmón y atún.
Aquí la regla es si es proteína, se puede convertir en albóndigas.

El pan:
Seguro ya se han dado cuenta de que tengo una tendencia a amar las cosas japonesas, es por eso que yo recomiendo el panko (pan rallado en lugar de molido)…
…Aunque recuerda que en todas las recetas se pueden adaptar a tu gusto y a lo que tengas en casa, así que puedes usar pan molido tradicional o incluso los empanizadores que vienen sazonados, lo importante es la capacidad que tengan de absorber la leche.
Aún no pruebo si se puede con empanizador de maíz tipo Corn Flakes pero igual valdría la pena intentarlo.

Las hierbas (o especias)
La parte más especial del sazón no solo es saber que cantidad de sal y de pimienta nos gusta en los platillos, siempre voy a decirlo pero las hierbas y especias que agregues pueden cambiar por completo su sabor.
Si quieres unas albóndigas de Ikea, añade cebolla finamente picada, nuez moscada y cardamomo.
Para unas albóndigas italianas, agrega a la carne perejil, orégano y, porque no? un poco de queso parmesano.
Y para unas albóndigas a la alemana, puedes sazonar con pimentón (paprika), mostaza y salsa Worcestershire (salsa inglesa).
Haz tus combinaciones favoritas y si encuentras un sabor impresionante ¡no dudes en compartirlo con nosotros!













